jueves, 14 de febrero de 2013

Capitulo 024:

Capitulo O24:

-No lo hare –grito.

Estaba harta de todo lo que me había pasado, harta de la gente, harta de benjamín. Solo quería que esto acabara y poder salir de aquel internado y no regresar nunca. Quería morir, mi vida no era buena, nada buena. 
-¿Qué rayos es lo que planeas hacer con migo? –pregunto tirándole un manotazo en el cachete a benjamín y en ese instante me separe de él y me hizo un poco para atrás.
-Solo quiero que me escuches –grito- Quiero que me des una oportunidad ¿o quieres que te obliga? –pregunto.
-No me obligarías –dije- No vivo por nada y lo sabes no amo a nadie –dije.

En ese momento no me acorde de Justin, ni de Baltazar ni de mis padres. Solo quería que todo acabara. Le di aquella cachetada a benjamín, yo retrocedí y caí al suelo, benjamín solo toco su mejilla y metió un dedo suyo en la boca al sacar ese dedo salió con sangre.

-¿Viste lo que hiciste? –Pregunto- ¿Acaso yo te eh golpeado? ¡Puedo hacerlo! –grito.
-¡Basta benjamín! –grite.

Tape mis orejas con ambas manos, no quería escuchar ninguna palabra que saliera de su boca. Este solo se agacho hacia mí y quito bruscamente mis manos de mis orejas y las aventó hacia el suelo bruscamente. En este momento grite, Benjamín dirigió su mirada mala hacia mis ojos y tomo de mi brazo. Sus labios se dirigieron hacia mis oído planeaba decirme algo.

-Quiero que me escuches muy bien ¿entendido? Puedo hacerte más daño de lo que piensas. A ti y a tus seres queridos cuentan Justin, Baltazar y tus padres, ahora si no quieres estar con migo todo te saldrá más y ellos saldrán lastimados ¿aceptarías aquella responsabilidad? –susurro y pregunto.

Me quede callada en ese momento, no sabía que decir. Benjamín… sabía que sería capaz de todo ¿pero qué rayos pensaba hacerme a mí o a mis seres queridos? Solo al pensarlo me daban escalofríos. Benjamín era malo muy malo ¿Cómo podía haber tanta maldad en un chico de 17 años? Trate de soltarme de él, pero era imposible, nunca pensé que tuviera tanta fuerza.

-Entonces… ¿Qué dices? –pregunto.
-No estaré con tigo benjamín ¿Por qué me obligas? ¿Por qué me obligas a hacer algo que no quiero? ¿Por qué tenía que ser yo? ¿Por qué no podía ser otra chica del internado? –grite.
-Porque tú me gustas ya te lo dije y no parare hasta que estés con migo. Tú decides, te dejare ir, mañana me tienes que decir “si” a la pregunta que te hice o sabes lo que pasara –dijo.

Por fin me soltó y Salí corriendo de ese lugar. Corrí durante horas o eso creía yo, me había perdido en todo el bosque. Lo que más deseaba era poder llegar al internado y poder abrazar a Justin y sentir sus labios sobre los míos. La noche había llegado en el bosque, tenía miedo de que benjamín me encontrara y me hiciera daño.

-Bridget –grito.
Estaba perdida entre todos esos árboles. Escuche a alguien gritar mi nombre, voltee hacia todos lados hasta que por fin lo vi, pero no era exactamente a quien yo quería encontrarme. Cada que daba un paso hacia mi este se tambaleaba y tenía en su mano una botella de ¿cerveza?

-Ba…Ba… ¿Baltazar? –pregunte.

Corrí hacia y pase su mano sobre mi cuello para que pudiera apoyarse en mí, su aliento apestaba. ¿Por qué rayos había tomado? Se dejó caer al piso y soltó aquella botella.

-¿Qué rayos es lo que paso por tu cabeza? –pregunte.
-No lo sé solo… Ayúdame, la cabeza me duele –dijo.
-Recuéstate –dije.

Me senté entre los arboles e hice que su cabeza se apoyara en mis piernas. Este solo durmió y sabía que entre sus sueños había algo malo ya que varias lágrimas salían de sus ojos.

A la mañana siguiente Baltazar despertó. Este solo toco su cabeza y salió disparado a poder vomitar. Después de varios minutos de vómitos fluidos se dirigió hacia mí.

-Lo siento bridget… Yo te buscaba y nunca te encontré –dijo.
-¿Por qué rayos tomaste? –grite.
-Estaba presionado –dijo- Nunca lo volveré a hacer esto es una porquería –dijo.
-No importa… -dije.
-¿Dónde te metiste todo el día de ayer? –pregunto.

Las cosas que pasaron con benjamín se volvieron a mi cabeza, no quería que le hiciera algo a Baltazar y menos a Justin. Evite aquella pregunta y acomode el pelo de Baltazar un poco. Me pare del suelo y comencé a caminar sin rumbo.

-Bridget ¿estás bien? –Pregunto- ¿Dónde estuviste ayer?

Corrió un poco para poder alcanzarme, siempre camine rápido y más cuando estaba nerviosa.

-¿Podrías dejarme de hacer esta pregunta? –Pregunte- No quiero hablar sobre eso –dije.
-No la dejare de hacer si no me dices que es lo que pasa… sabes que te amo y quiero saber que estas bien –dijo.
-No estoy bien Baltazar ¿sí? ¿Satisfecho? –pregunte.
-No hasta que me digas que es lo que te pasa –dijo.

Paro un momento y su vomito salió de nuevo. Como odiaba que la gente vomitara o no más bien que tomara o fumara. Lo ayude a pararse del piso y continuamos caminando. En todo el camino estuve callada, nunca le dije que es lo que me pasaba a Baltazar, sabía que si lo hacía le haría algo a benjamín y benjamín era mucho más fuerte que Baltazar.

-Tengo calor ¿tú no? –pregunto.
-No tengo calor –dije.

Se quitó su abrigo y al instante quito su camisa. Su cuerpo no superaba el de benjamín pero debía admitir que los pocos pelos que tenía en su abdomen era realmente sexys.

No hay comentarios:

Publicar un comentario